Arquitectura verdaderamente eficiente

Está en boca de todos y por diferentes razones.  Lo cierto es que los efectos del cambio climático no son solo los Tsunamis en las playas de Tailandia, ni el fenómeno Del Niño en América Latina.  Cada vez más, desde cualquier disciplina nos vemos abocados a enfrentar el enorme reto de la eficiencia energética en aras de un modo de vida más amable para el medio ambiente y el entorno.

En esa línea, el Standard Passivhaus es un riguroso proceso de diseño que integra la eficiencia energética con el ánimo de reducir al máximo la huella ecológica de la construcción.  El resultado de alicar éstos exigentes criterios son edificios de bajísimo uso de energía y que requieren minimas cantidades de energía bien para ventilarse o calefactarse.  El diseño passivhaus no es un suplemento o un agregado a un diseño arquitectónico.  Es un proceso integrador de eficiencia, diseño, racionalización de recursos y optimización de materiales locales en beneficio de estructuras sostenibles.

Exponemos aquí nuestras primeras 3 razones que nos han hecho abrir los ojos y la mirada al Standard Passivhaus. Seguro que alguna de éstas les va a sonar.  Al menos alguna de éstas y las que tratremos en los siguientes posts puede que te pique en la tecla de la curiosidad y te animes a revisar el estandard de Passivhaus con un poco más de interés.  Nuestro estudio no para de descubrir y aplicar nuevos elementos a los diseños en los que trabajamos. Listos…vamos al lío…

Puentes Térmicos

Veo puentes térmicos por todas partes.  Como buenos arquitectos nuestros ojos están entrenados para disfrutar del ritmo de vigas proyectándose en los aleros de diferentes construcciones.  Admiramos las vigas de madera o acero cuando planean suavemente a través de paredes externas o de suelo al techo.  Pues ya no!  Ahora no puedo evitar reconocer los puentes térmicos que crean estos detalles, con su resultante perdida de calor y riesgos de degradación de materiales.  Es precisamente en esos puntos de «contacto» donde se presentan variaciones de materiales, o la inserción de elementos constructivos de diferente conductividad donde se presentan puentes térmicos.  Si quereís indagar un poco más sobre puentes térmicos os recomiendo este post de Inarquia que lo desarrolla de forma muy completa.

Los puentes térmicos, por lo general, suponen entre un 5% y un 10% de las pérdidas de calor de un edificio por lo que para lograr edificios con un grado muy alto de confort y un consumo de energía muy bajo debemos mantener un riguroso control de los puentes térmicos y de las infiltraciones de aire indeseadas. Para lograr edificios libres de puentes térmicos es necesario un buen diseño y planificación, así como un especial cuidado en los detalles constructivos y en su ejecución durante la obra.

A modo de guía, el Passivhaus Institut ha creado unas reglas que nos ayudarán a minimizar y evitar los puentes térmicos en todos sus casos que resumimos brevemente:

• Evitar – Intentar no “romper” la continuidad del aislamiento térmico.
• Penetrar – Si no puede evitarse “romper” la continuidad del aislamiento, en los puntos de ruptura debe utilizarse un elemento con una conductividad muy baja.
• Conectar – Conectar diferentes elementos constructivos sin interrumpir el aislamiento térmico.

Ventilación Mecánica.

Las cosas como son.  Habiendo nacido en el mediterráneo nunca dejas de creer en las bondades de la ventilación natural.  Entendíamos como «muy natural» aquello de abrir las ventanas y las puertas para que la ventilación de viviendas y oficinas dependan de los caprichos de las estaciones y del tiempo.  La herejía de los ventiladores, ductos y filtros en la ecuación de la ventilación cruzada apareció como un fagocitador de energía.  Si asociamos la ventilación mecánica a una máquina de aire acondicionado con todos los inconvenientes que provoca el aire recirculado que se calienta o se enfría seguro que vemos en ello una amenaza energética latente.

La ventilación mecánica que provoca la certificación Passivhaus provee solo aire fresco, nunca re-circulado y es incluso filtrado en el proceso.  Ello mejora significativamente la calidad del aire interior.  En esencia el proceso de ventilación mecánica recupera el calor del aire que se extrae de la vivienda o construcción.  El aire recuperado se utiliza para calentar el aire fresco que entra al sistema de ventilación/calefacción.  Esto permite ahorrar más energía que la entrada de aire frío con la consiguiente utilización del sistema de calefacción para lograr, de nuevo una temperatura confortable del mismo.

Si bien nos sorprende la ventilación mecánica controlada con los criterios Passivhaus, es la combinación de sistemas de recuperación de calor con alternativas creativas para generar en diferentes estancias entornos más cómodos y saludables que depuran el aire interior, climatizan y aportan confort, las que no dejan de sorprendernos.  Dependiendo de las necesidades y funciones del edificio vale la pena estudiar a fondo soluciones concretas a cada caso específico.  No obstante, para que sigas informándote sobre el diseño más adecuado consulta esta guía de Onhaus sobre las alternativas de ventilación passivhaus.

Marcar casillas de una lista NO hace sostenible una construcción

No basta con marcar todos los elementos de las casillas que conforman el estandard Passivhaus para acreditar la etiqueta verde de una construcción.  Veamos:  ¿Si incluyes alternativas de compostaje en una vivienda y le agregas una cubierta vegetal tienes un edificio Passivhaus? La categórica respuesta de nuestro estudio de arquitectura y diseño es NO.  Un diseño sostenible NO ES una suma de tics en una lista.

No son los ítems de una lista los que importan.  Es el diseño integrado de una construccion para unos fines concretos resueltos con gracia y simplicidad lo que genera confort, efciencia usando los mínimos recursos para generar el máximo benefecio energético.  No es solo que pensemos en el cambio climático o la escasez de recursos y energía a la que nos enfrentamos.  Es que en este, nuestro tiempo, con la tecnología, el conocimiento, los materiales y habilidades que poseemos no hacerlo es casi como cometer un pecado.  La arquitectura ha cambiado para siempre. Integrar diseño y eficiencia son nuestro nuevo código.

¿Quieres saber más sobre diseños integrales que aparejen diseño, funcionalidad y eficiencia energética? Estás en el lugar correcto.

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